TICA

12/11/2021

TICA 

 

Nuestra pequeña yayita, tan enérgica y preciosa hasta el final de sus días. 

Gracias por todas tus muestras de amor, tú siempre me lo has dado; gracias por cada infinito recuerdo, por las aventuras que nos has hecho vivir.La suavidad de tu tacto y la calidad de cada uno de tus maullidos, tus llamadas de atención y tus caricias con las patitas, cada uno de tus "besos de lija", cada mote que reconocías; gracias por habernos demostrado que hay que pedir ayuda cuando se necesita, por enseñarnos a amar con todas nuestras fuerzas. 

Mi tiki, pequeñita, grisita, morrita, peluche, mi "malonita"; todos estos motes y palabras de amor que tú reconocías y respondías con gestos y dulces maullidos; has dejado un vacío enorme en nuestros corazones y en el de Keny, te busca por toda la casa y llora como si supiese que lo ves desde donde ahora estás. 

Tengo grabadas todas tus melodías, las notas que hacías sonar para nosotros y para Keny, en forma de maullidos, ronroneos y bufidos. Adoro el tacto de tus orejitas y de cada parte de tu pequeño y precioso cuerpo, porque todavía parece que puedo acariciarte y que tú ronroneas cuando lo hago. Todavía hacen eco tus preciosas melodías en mi cabeza y resuenan en todo mi ser, pues con todo te quiero y te querré siempre. 

Gracias, una vez más, por haberme acompañado los tres últimos años de tu vida; aunque nos conocíamos desde que eras un bebé y decidiste seguir a tus antiguos dueños hasta casa, como a mí me seguías desde que entraba por la puerta hasta que salía. Incansable compañera, quince años de ternura y de amor, gracias por estos tres últimos con nosotros.

Hasta que me apague yo, brillarás siempre dentro de lo más interno de mi ser. Gracias por ser luz, no te apagarás nunca porque el amor y cariño que te profesamos te hará brillar eternamente.

Para siempre, Tika, te adoramos.