OREO

17/05/2019

Te encantaba estirarte en el jardín sintiendo la dulce brisa de la montaña mientras yo te acariciaba la cabecita.

Miraba a tus ojos y ví en ellos al mismísimo firmamento: profundos, llenos de inocencia y de verdad.

Quererte fue muy fácil y por ello te haremos eterno con nuestro recuerdo, siempre. Espéranos en el cielo, mi amor, junto con Betty y el resto de la família.

Te queremos, Oreo.