Que duro es despedirme de ti MUSHU o GORDITO como yo te llamaba.
Eras algo más que una mascota, eras y siempre serás parte de mi corazón, sabía que te quería pero no hasta qué punto...
Qué difícil es estar en casa y no verte corretear detrás, despertarme si se me habían pegado las sábanas, hacerme "budú" mirándome fijamente para que te pusiera el desayuno o la cena y esperar pacientemente tu segundo premio si me despistaba y solo te daba uno.
Mi gordito gracias por estos 2 años juntos aunque te has ido muy pronto sé que has sido muy feliz.
Espérame junto a Odín y Lasky que algún día volveremos a estar juntos.